jueves, 18 de febrero de 2010

Ocho meses y medio

Ya toda la ropa está limpia, planchada y guardada. Los bolsos armados. Nuestra casa lista para recibirla, nosotros ansiosos por conocerla, y aún faltan 6 semanas.

A mi me invade una sensación ambigua, o dos sensaciones, no sé.

Por un lado quiero que nazca ya, quiero conocerla, ponerla en mi pecho, verla en brazos de su papá, que conozca a su hermano. Quiero llegar a casa y vivir esta nueva vida que decidimos tener. Las contracciones molestan cada vez más, el cansancio se hace notar y el calor no ayuda. Después de caminar distancias largas mis pies y mi cintura me pasan factura, hace ya no se cuanto no puedo dormir una noche de corrido (sin levantarme al baño) y ni hablar de agacharme a atarme los cordones.

Pero por otro... no quiero dejar de sentir sus pataditas, jugar con Pablo a adivinar sus movimientos. Preparar sus cosas, imaginar su cara. El hecho de que nazca querrá decir que inevitablemente en unas cuantas semanas que pasarán volando, tendré que dejarla con gente que no conozco para ir a trabajar. Y si bien es algo que sé desde un principio no deja de hacerme un nudito en el corazón. Además está el tema de la lactancia que me preocupa bastante... quisiera seguir amamantando, sacarme leche y no tener que darle leches maternizadas, pero no sé hasta qué punto podré hacerlo...

Así está mi cabeza en estos días. Quizás sea algo que le sucede a todas las mujeres embarazadas, tal vez mi personalidad ansiosa me esté jugando en contra. Por lo menos tengo este espacio para desahogar. No?

1 comentario:

Unknown dijo...

BABYASTROLOGY.COM says: 30 days to go!

Trata de calmarte y disfrutar estas ultimas semanas, o dias, nadie sabe. No pienses en el después. Aprendé de tu cuñado, como hice yo, y disfrutá el ahora.
Te quiero sonsa, y la llegada de Sofi me pone muy felíz. Y poder compartirla con Joaqui, más todavía.
(tenemos que ir preparando el dibujito...guiño guiño)